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Mostrando entradas de septiembre, 2025

56. Orar con la liturgia: oración colecta del Domingo XXV del Tiempo Ordinario

Catequesis mistagógica sobre la oración colecta del Domingo XXV del Tiempo Ordinario Oración colecta: Oh, Dios, que has puesto la plenitud de la ley divina en el amor a ti y al prójimo, concédenos cumplir tus mandamientos, para que merezcamos llegar a la vida eterna. Por nuestro Señor Jesucristo. Introducción Esta colecta nos recuerda el corazón mismo del Evangelio: el amor. Toda la ley de Dios encuentra su plenitud, su sentido más profundo, en el amor a Él y al prójimo. No se trata de una norma externa, sino de una vida interior transformada por la caridad. Cumplir los mandamientos, entonces, no significa solo obedecer reglas, sino dejar que el amor oriente cada pensamiento, palabra y acción. En esta oración pedimos a Dios no tanto la fuerza de cumplir, sino la gracia de amar. Porque solo el amor verdadero nos abre el camino a la vida eterna: esa comunión plena y definitiva con Dios y con todos los que Él ama. Amar es, en el fondo, comenzar a vivir ya desde ahora la eternidad....

55. Orar con la liturgia: oración colecta del Domingo XXIV del Tiempo Ordinario

Oración colecta: Míranos, oh Dios, creador y guía de todas las cosas, y concédenos servirte de todo corazón, para que percibamos el fruto de tu misericordia. Por nuestro Señor Jesucristo Introducción Esta colecta nos introduce en una actitud de confianza filial: nos ponemos bajo la mirada de Dios, nuestro Creador y guía. Él no solo nos ha dado la vida, sino que la conduce con sabiduría y amor hacia su plenitud. En esta oración pedimos la gracia de servirle con un corazón íntegro, libre de doblez, de modo que toda nuestra vida sea una ofrenda viva. Solo quien sirve desde el corazón experimenta el fruto más dulce de la misericordia: saberse mirado, amado y sostenido por Dios en todo momento. Servir con todo el corazón no es solo cumplir con deberes religiosos, sino dejar que la misericordia de Dios transforme nuestras intenciones, nuestras acciones y nuestras relaciones. Así, nuestra vida se convierte en un reflejo de su amor activo en el mundo. 1. Invocación inicial Oh Dios, Crea...